Diferencia entre alimento y nutriente
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Si estás empezando a interesarte por tu alimentación es evidente que estarás familiarizado con los conceptos de alimentación y nutrición, pero es posible que tengas bastantes dudas con respecto a si se trata de sinónimos o si, efectivamente, tiene diferencias marcadas. En muchos contextos usamos los términos alimentación y nutrición como si hicieran referencia a lo mismo, y aunque es evidente que son conceptos íntimamente ligados son diferentes y es preciso conocer por qué lo son.
Voy a explicarte en este artículo algunas nociones básicas para que puedas diferenciar de forma efectiva entre el concepto alimentación y el de nutrición, pues, especialmente si estás interesado en mejorar tus hábitos alimenticios o estás buscando respuestas a posibles carencias nutricionales, necesitarás conocer mejor el tipo de vocabulario que se emplea en el mundillo para comprender cómo puedes mejorar tu calidad de vida a través de tu alimentación (¡y nutrición!), así que sigue leyendo.
Definición de nutrientes
El término nutrientes hace referencia a las sustancias químicas que están incluidas en los alimentos y que son los responsables de que obtengamos la energía que necesitamos para el día a día. Es decir: se trata de los compuestos que necesitamos para que nuestro cuerpo funcione en óptimas condiciones, y hay diversos tipos de nutrientes:
- Micronutrientes. Los micronutrientes son aquellos nutrientes presentes en frutas y verduras y que consisten principalmente en vitaminas y minerales, como la vitamina C o el fósforo. Estos nutrientes son de vital importancia en procesos de cicatrización, regeneración de tejidos, en la formación de glóbulos rojos y para reforzar el sistema inmune de nuestro organismo.
- Macronutrientes. Estos se dividen a su vez en tres tipos de nutrientes: los carbohidratos, que por algún motivo la sociedad ha querido convertir en nuestro principal enemigo pero que son esenciales para llevar una dieta equilibrada y saludable, y cuya principal función es la de proporcionarnos una elevada dosis de energía de rápida utilización; las proteínas, un macronutriente esencial para formar músculo y cuyo principal cometido es transportar sustancias a través de la sangre y formar nuevas células; y finalmente las grasas, que también nos aportan energía, pero esta vez de uso lento.
Definición de alimentos
Los alimentos son, por decirlo de algún modo, los “portadores” de los nutrientes. Son sustancias más complejas que están compuestas por diversos nutrientes, de ahí que muchas veces nos fijemos en el valor nutricional de determinados alimentos, pues cada uno de ellos se conforma de diferentes nutrientes, como son las vitaminas, los minerales, las proteínas, etc. Es lo que los seres humanos, y los seres vivos en general, consumimos de forma directa para poder obtener los nutrientes que necesita nuestro organismo, pues no nos es posible consumir nutrientes del aire y sin más, es necesario contar con “una sustancia portadora” que no solo nos aporte los nutrientes necesarios sino que, también, nos ayude a absorberlos correctamente.
Al igual que los nutrientes los alimentos también se dividen en diferentes grupos, en función de los nutrientes que aporten. Es por eso por lo que conceptos como los macronutrientes que hemos mencionado anteriormente, los carbohidratos, las proteínas y las grasas, las relacionemos de forma directa con alimentos específicos. Normalmente pensamos en pan, pasta o patatas cuando hablamos de carbohidratos; en carnes y pescados cuando hablamos de proteína; y en aceite o mantequilla cuando hablamos de grasas.
Los grupos de alimentos no obstante se subdividen en otras categorías en función de su origen o forma y no únicamente de los nutrientes que aportan, y estos grupos son:
- Lácteos. Este grupo está constituido por leche, yogur y queso, y son de procedencia animal.
- Frutas y vegetales. Alimentos naturales y directos del árbol o de la tierra, con nutrientes como vitaminas y minerales.
- Carnes, huevos, pescados y mariscos. De origen puramente animal y con un contenido de proteínas muy elevado.
- Panes, cereales y derivados. Normalmente con un proceso de preparación previo, no como el consumo de frutas o vegetales, y muy relacionado con los carbohidratos.
- Granos y oleaginosa.
- Tubérculos. Nacen bajo tierra, como las patatas, zanahorias, cebollas, rábanos, etc.
¿Qué diferencia hay entre alimentación y nutrición?
Como hemos visto, los alimentos y los nutrientes no son exactamente lo mismo, aunque sí estén relacionados. La diferencia principal entre alimentación y nutriente es que los alimentos están compuestos de nutrientes, en tanto que los nutrientes son conceptos más aislados, más específicos. Un nutriente puede ser la vitamina C, en tanto que un alimento será una naranja, que además de vitamina C también aportará dentro de su composición vitamina A, ácido fólico, calcio, etc.
Los alimentos son los transportadores de nutrientes que se encargan de que estos lleguen hasta nuestro organismo y se absorban. Hoy por hoy podemos consumir también cápsulas de determinados nutrientes en caso de que contemos con alguna carencia nutricional o no podamos conseguirla de forma natural debido a nuestra alimentación, pero incluso estos son preparados a base de alimentos, pues son la fuente nutricional por antonomasia.
Es por esto por lo que cuando hablamos de alimentación y de nutrición no hablamos de lo mismo. Puedes tener una alimentación que sacie tu hambre y que sientas que no tienes ninguna carencia, pero tal vez tu nutrición no está siendo óptima al no consumir todos los alimentos que debes para conseguir X nutrientes. Un ejemplo muy sencillo es el de la comida rápida: podemos basar nuestra alimentación en comer comida rápida, pero no podemos basar nuestra nutrición en ella porque este tipo de alimentos no contienen apenas nutrientes, únicamente calorías, por lo que, si bien nos estamos alimentando, no nos estamos nutriendo.
Semejanzas entre nutrición y alimentación
Como hemos visto a lo largo de este artículo, los conceptos de nutrición y alimentación van muy ligados y son prácticamente inseparables. Podemos decir que una persona puede alimentarse pero no nutrirse, pero no puede nutrirse sin alimentarse. Aunque son conceptos diferentes, es evidente que tienen algunas semejanzas:
- Se encargan de que nuestro organismo funcione correctamente. Los alimentos son los responsables de aportarnos los nutrientes necesarios, por lo que un alimento en concreto puede ser muy nutritivo.
- Aportan energía. Los nutrientes nos aportan energía, especialmente los macronutrientes. Aunque hemos visto que hay determinados alimentos que no nos aportan muchos nutrientes, como la comida rápida, siempre nos aportan energía, por lo que los alimentos, aunque no sean nutritivos, también nos aportan la energía que necesitamos para el día a día.
- Son inseparables. Con esto nos referimos a que los nutrientes y los alimentos son dos conceptos que no pueden separarse, y sus semejanzas se aúnan en el hecho de que se necesita de ambos para vivir. Necesitamos alimentarnos para tener energía y vivir día a día, y necesitamos los nutrientes de esa alimentación para que nuestro organismo esté sano.
En conclusión, no son lo mismo, pero no pueden ir por separado. Incluso las comidas con menos nutrientes siguen siendo un aporte esencial de energía y contarán sí o sí con determinados nutrientes, aunque no sean los mejores, como puede ser el sodio. Los nutrientes, por otro lado, difícilmente llegarán a nosotros si no es mediante nuestra alimentación, pues aunque hay complementos alimenticios o incluso sueros en caso de que no puedas consumirlos normalmente estos vienen extraídos de alimentos, aunque se hayan aislado a posteriori para poder manipularlos.
Esperamos que con este artículo hayas comprendido que no es lo mismo hablar de alimentación que de nutrición, pues es de vital importancia conocer que no toda alimentación es nutritiva y saber cómo aplicar el cambio que necesitas en tu vida para que eso cambie. Nos alimentamos todos los días y prácticamente a todas horas, pues nuestro cuerpo necesita energía y sabe cómo pedírtela, pero el problema del ritmo frenético de vida que llevamos hoy por hoy hace que la alimentación a la que recurramos no sea la opción más óptima. Ahora que sabes que, además de en tu alimentación, tienes que fijarte también en tu nutrición, échale un vistazo al valor nutricional de lo que consumes para conseguir un cuerpo más sano y fuerte.
Y, por supuesto, nuestra recomendación siempre es que consultes con un especialista nutricional para que te aconseje durante el camino de mejorar tu alimentación, pues no siempre es fácil empezar de cero y no cabe duda de que intentar cambiar nuestra alimentación por nuestra propia cuenta y riesgo no tiene por qué salir bien, pues muchas veces es una cuestión de fuerza de voluntad y es más fácil recurrir a platos con mayor sabor pero menos nutrientes que a la inversa. En cualquier caso, cuídate, hazte análisis regulares y, sobre todo, ¡disfruta de tus comidas!